Andalucía agradece a los presidentes y presidentas de los Parlamentos el “brillo” que dan a la ciudad de Medina Azahara, con su apoyo a la candidatura a Patrimonio Mundial de la Unesco

Juan Pablo Durán y los presidentes y presidentas autonómicos expresan su apoyo a Median Azahara a su candidatura a Patrimonio Mundial de la Unesco

Fecha: 13/11/2017

La Conferencia de Presidentes de Parlamentos Autonómicos (COPREPA) ha expresado hoy su apoyo a la candidatura de la ciudad califal de Medina Azahara a Patrimonio Mundial de la UNESCO, que hoy han visitado. “Medina Azahara no es de Córdoba, es de la humanidad y el apoyo institucional que hoy dan los presidentes y presidentas le dan más brillo a la ciudad que brilla”, ha asegurado el andaluz, Juan Pablo Durán.
Así lo puso de manifiesto en declaraciones a los periodistas tras la visita que ha realizado junto a las presidentas Violeta Barba, de las Cortes de Aragón; Ainhoa Aznárez, del Parlamento de Navarra; Rosa Peñalver, de la Asamblea Murcia; Carolina Darias, del Parlamento Canarias y Blanca Martín, de la Asamblea Extremadura, y con Pedro Sanjurjo, presidente de la Junta General del Principado de Asturias.
En declaraciones a los periodistas, tras visitar el yacimiento junto al director, Alberto Montejo, y el delegado de Cultura de la Junta de Andalucía en Córdoba, Francisco Alcalde, el presiente Juan Pablo Durán, dio las gracias, en nombre de los andaluces y las andaluzas, a los miembros de Coprepa por el gesto que han tenido para sumar fuerzas y voluntades y confió en que pronto puedan celebrar juntos la candidatura.
El presidente del Parlamento andaluz señaló que estamos en un momento importante y todos los apoyos que reciba la candidatura es positivo, tanto los de los presidentes y presidentas de Coprepa como los de los alcaldes de las ciudades patrimonio que en la jornada de hoy también respaldaron la candidatura en el acto organizado por la Consejería de Cultura.
Durán destacó que Medina Azahara refleja el legado y el buen trabajo de conservación y la convivencia de tres culturas en Córdoba, en un lugar de diálogo y tolerancia, tan necesario ahora.
La historia de Medina Azahara comienza con Abderramán III y su decisión de construir una ciudad a la afueras de Córdoba, entre los años 936 y 976, se trata de una ciudad que en su conjunto aglutinó las labores tanto administrativas como residenciales del califato. Aprovechando la orografía del terreno, se diseñó a partir de las alturas existentes, donde la terraza superior estuvo ocupada por la función privada y residencial de la familia real, así como la función gubernativa.
En altura inferior se desarrolló propiamente la ciudad con los servicios propios y . El abastecimiento de agua se desarrollaba utilizando la antigua canalización de época romana. La conexión con la ciudad de Córdoba se realizó a partir de tres puentes que salvaban los arroyos existentes. De estos puentes aún se conserva el de Los Nogales.
Los materiales que se utilizaron en su construcción nos hablan del gran interés por parte del monarca de mostrar su gran poder y supremacía. Los fastos de la corte se desarrollaban en un escenacio con piedras areniscas, mármoles portugueses, estanques y jardines. Debieron ser impresionantes las recepciones en el llamado Salón Rico de al-Hakam II (961-976) con el protocolo de palacio y los jardines.
Se trata de un testigo único en la presencia musulmana en Europa y, en concreto, de esa etapa de la historia.
La Junta de Andalucía registró el pasado 12 de enero ante el Ministerio de Educación y Cultura sendas copias oficiales, en inglés y castellano, del que va a ser el documento definitivo con el que Medina Azahara intentará entrar en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO 2018.
El pasado 11 de septiembre el Consejero de Cultura de la Junta de Andalucía y la Alcaldesa de Córdoba presentaron la marca y la imagen de la campaña de apoyo a la candidatura de Medina Azahara para ser designada Patrimonio Mundial de la UNESCO. con tres arcos de herradura entrelazados y el lema de "Enamórate de Medina Azahara, la ciudad que brilla", basado en la traducción del nombre árabe de la ciudad califal.
Ser patrimonio mundial supondrá un atractivo más para hacer de Medina Azahara un referente en el turismo cultural, que atraerá a más visitantes, tanto a la ciudad de Córdoba, como a la ciudad califal. Una oportunidad de conservación, recuperación y difusión del Patrimonio de un conjunto arqueológico único en el mundo y también una importante oportunidad económica para la ciudad.